DESDE ULTRAMAR:

AQUEL QUE NO QUIERA VER QUE NO VEA, EL QUE NO QUIERA OIR…

Por Manuel Nin Matos

Todo apunta a que la cúpula del PLD tomo la decisión de “to’ toro o to ’vaca”, es decir que se olvidaron de que en democracia se puede volver al poder mas adelante y que nuestro país tiene historia; consideran que ya no hay mas elecciones y que no importan los principios y la moral, esta es la batalla crucial, la que dirá si el nuevo “MESIAS” dominicano Leonel Fernández se reelegirá por “réquiem eterno donaidon” y por tanto la violación de todo y de todos es valido.

Sin dudas, es mi temor, el Partido de la Liberación Dominicana ha resolutado que ellos no caben en el país con los demás partidos opositores, que la meta es destruir todo lo que le adversa políticamente ya por la vía de la compra directa, las promesas (para los incautos) y la liquidación moral para los que no se sometan. Realmente sorprendente que un partido nacido bajo el lema de “Liberación Nacional” este reeditando épocas superadas en nuestra patria.

Leonel Fernández ha inaugurado la era de la MENTIRA como base de la promoción política, la compra de conciencia como método de crecimiento, la manipulación y la amenaza como expresión de su “democracia”. El que no quiera ver y oir las verdades que demuestran lo que decimos que se queden ciegos y sordos, como lo hicieron durante los 30 años de Trujillo, los 2 años del triunvirato y los 12 años de Balaguer.

Esos 30 fatídicos años endiosamos a un guardia de campo, con mucha inteligencia y habilidades; pero solo el lambonismo y el miedo lo elevaron por sobre todos los dominicanos permitiéndole enterrar de manera atroz a miles de seres humanos valiosos; durante los dos años del Triunvirato esos remanentes trujillistas que atizaron el golpe de estado contra el Profesor Juan Bosch siguieron el rosario de muertes y retrazo de la democracia dominicana real.

El mismo miedo nos hizo retroceder en 1965 permitiendo que los Invasores de la época impusieran sus designios y se “pacificara” la nación a sangre y fuego; miles de dominicanos, “comunistas” a la sazón, murieron en campos, callejones, escuelas, universidades y en sus propias casas; todo por la “democracia al estilo occidental”.

De nuevo miro con tristeza como una parte de esos intelectuales liberales, políticos de la exizquierda anti “imperialistas” abrazan una causa a todas luces antihistórica, anti moral y como antítesis de todo lo que este pueblo reclama para su desarrollo y verdadera libertad.

Si la vía alguna vez fue el líder máximo, el escogido por el destino y el enviado por Dios; hoy esos predestinados no salen de procesos dolosos, de la corrupción rampante, de la descalificación de los semejantes; esos prohombres salen de procesos reales de sus pueblos; de elección pulcra y libérrima y montadas en objetivos patrios de proporciones históricas.